Celebramos el día del libro en el cole

 

Mañana, jueves 25 de abril, celebramos el día del libro.

 

Hemos trabajado durante esta semana para que todo esté a punto. 

Ya sabemos quienes son los ganadores del concurso de relatos "Padre Avelino"

Las maquetas, los murales, los libros gigantes todo está listo para disfrutarlo.

Los delegados de lectura han estado ensayando sin parar, veremos que tal sale...

Busca tu libro favorito y lee un párrafo. Es suficiente para dar un homenaje a ese objeto que nos hace soñar y disfrutar cada vez que nos adentramos en él.

ACUARELAS Y JUEGOS: no te lo pierdas

Me gusta leer, ¿y a ti?

UN PRECIOSO VIDEO QUE NO TE DEBES PERDER

 

 "Argine" es el título del cortometraje de Julia Siméon hecho a través de fotogramas con modelos 3D. 

Presenta la historia de una niña que utiliza su creatividad e imaginación para hacer sus sueños realidad. 

Me encanta cómo la lectura de un libro la lleva a un gran proyecto, a ser partícipe de alguna forma de la historia que leyó. En definitiva, los libros inspiran, motivan y nos mueven por caminos desconocidos.

Vaya éxito estamos teniendo este año con la propuesta lectora en familia. 

Todos participan, leen, disfrutan...

SEMANA DEL LIBRO. DEL 22 AL 26 DE ABRIL

 Este año celebraremos el día del libro dedicando todos nuestros esfuerzos e ilusiones a reivindicar el libro como objeto.

El libro está hecho de papel, podemos tocarlo, olerlo, jugar con él... Sale del trapo o de la madera, y debemos aprender a respetarlo. 

El libro de papel es un ser vivo que crece con nosotros. Lo llevamos entre las manos, en el bolso, la mochila... Él nos enseña a pensar, aprender y soñar.

 

Si quieres saber alguna de las actividades que vamos a realizar juntos, pincha en este esquema y podrás ver el guión de lo que va a ser la semana del libro.

 

 

Taller de  PAPEL DE AGUAS

Entre las actividades que se van a realizar con motivo de las semana del libro, el lunes comienza el primer ciclo el taller de papel de aguas, y en días posteriores irán el 2º y 3er. ciclo.
Servirá para decorar cuadernitos, carpetas, lapiceros... con papel de aguas. Seguro que habéis visto  estos productos  a la venta en las Ferías de Artesanía.

Los materiales que vamos a utilizar son muy asequibles, algunos seguro que los podéis encontrar en
 vuestras casas:

- Pinturas al óleo de colores       
- Aguarrás
- Papel blanco (folios)
- Una bandeja
- Agua 

El proceso es sencillo, aunque los resultados irán mejorando con la práctica. Para empezar,  llenamos de agua la bandeja.

En otro recipiente (un vaso de plástico, por ejemplo) disolvemos un poco de pintura al óleo con una pequeña cantidad de aguarrás.





Esa pintura diluida la iremos echando sobre el agua con la ayuda de un cuentagotas, un pincel...

La pintura se quedará flotando sobre el agua. así que, podemos añadir pintura de otros colores.
 Para conseguir un efecto  atractivo, tenemos que  mover la pintura sobre la superficie del agua con un palillo.



A continuación, colocaremos el papel sobre la superficie del agua intentando que no queden burbujas de aire. Al retirar el papel nos encontraremos con que la pintura se ha quedado adherida a la hoja. El proceso se puede repetir mientras siga habiendo pintura en el agua, aunque cada vez, los colores serán más suaves.


Dejaremos que el papel se seque para poder utilizarlo

¿A que quedan muy bonitos?
Pues veréis cuando los utilicemos para decorar nuestras agendas, carpetas...

La biblioteca familiar y la biblioteca personal

 

¿Para qué?
- Disponer de una colección variada y adecuada para las distintas necesidades de lectura de los niños y de los jóvenes.
- Tener los libros organizados.
- Aprender a valorarlos y a respetarlos.

¿Cuándo?
- De manera habitual, cualquier día de la semana.
- Para actividades especiales (reparar, registrar, decorar, etc.), los fines de semana y las vacaciones.

¿Cómo?
La biblioteca familiar y la biblioteca personal suelen estar muy relacionadas. De hecho, sus volúmenes suelen ir de una a otra y se complementan: un diccionario, un libro de imágenes, los cuentos clásicos…
Tan importante resulta disponer de una colección para nuestros hijos, variada y adaptada a sus distintas necesidades, como que la biblioteca familiar contenga una buena selección de libros: novelas, cuentos y otros relatos; libros monográficos sobre las aficiones familiares: arte, ciencia, viajes, cocina, naturaleza, música…; diccionarios; catálogos de exposiciones, museos u otros lugares visitados por la familia; libros y revistas profesionales de la madre y del padre; libros heredados o que forman parte de la tradición familiar… Todos ellos resultarán una base de importancia capital para la lectura de nuestros hijos. Poco a poco se irán interesando por ellos, irán usándolos, y parte de ellos se incorporarán a sus lecturas.

En cuanto a la biblioteca personal de niños y jóvenes, es importante dotarla de unas condiciones básicas:

- Una buena colección. Deberíamos empezar por disponer de una colección variada de libros. Desde pequeños, podríamos considerar tres tipos básicos de libros sobre los que comenzar a montar la biblioteca: libros para disfrutar de carácter literario (álbumes, cuentos, novelas, antologías de poemas, cancioneros…), libros para aprender y de referencia (libros monográficos de animales, de países y culturas del mundo, de ciencia y naturaleza, de música…; diccionarios visuales, diccionarios escolares y diccionarios de idiomas…) y libros para jugar o para hacer cosas (juegos, recetas, inventos…). A estos tres grupos se pueden añadir las publicaciones periódicas infantiles y juveniles (revistas, cómics, suplementos para niños y jóvenes de los periódicos…).
- La organización de los libros. El orden de los libros es otro requisito importante de la biblioteca. Impliquemos a nuestros hijos en decidir cómo organizarla y mantenerla en orden. Con los pequeños, podríamos considerar como forma de organización básica estos tres tipos de publicaciones (libros de lectura literaria, libros para aprender y de referencia y libros para jugar o hacer cosas) junto con las publicaciones periódicas infantiles. Con los mayores, se pueden ir planteando otras formas de organización próximas a las de las bibliotecas de adultos.
- Llevar un registro. Podríamos proponer a nuestros hijos hacer un registro de los libros, anotando algunos datos: el título, el autor o autora, un comentario y un espacio para indicar si lo hemos prestado. Al final de la libreta, se podrían añadir otros libros que hayan leído aunque no formen parte de su biblioteca: libros prestados (con la fecha de devolución, por ejemplo), libros de amigos…

- Actividades con y en la propia biblioteca. Puede ser una buena costumbre dedicar algunos ratos a mantener la biblioteca organizada, llevar al día el cuaderno de registro, intercambiar libros y hojearlos con los amigos, reparar los libros estropeados, decorar la biblioteca (preparar carteles para sus distintas secciones, hacer sujeta-libros para los extremos de la estantería, elaborar marca-páginas para uso propio y de regalo…). Para ello deberemos contar con unos materiales básicos (pegamento, tira adhesiva, un rollo de plástico adhesivo transparente, plástico transparente para forrar…). Mediante estas actividades nuestros hijos aprenderán a cuidar los libros, a mantenerlos en orden y a respetarlos. Todo ello también es un aprendizaje importante para la lectura.

Ilustraciones de Violeta Monreal

De esta ilustradora tenemos libros en nuestra biblioteca de aula. Si te gusta lo que hace, no te pierdas la exposición.